Presentar a Él, quizá ya no hace falta, pero se llegó la hora

ok nenas, esta es la cosa, escribi esto, y lo comparti a alguien, soy tan paranoica que imagino que pegando el texto en google pueden encontrar mi blog, lo pienso porque ya lo he probado... mi mundo es una burbuja estrictamnte privada y la excepcion se debe a que estoy en gratitud con el protagonista de esta entrada que a pesar de todo lo que parezca no soy yo

Bueno, a qui va ( y hoy sin imagenes, perdon por la masa de texto pero tengo poco tiempo ya)

Exploté____________ sin reflexionar mucho sobre lo que confesaba.
 Al instante me sentí la más imbécil____________ cualquiera lo habría pensado. ____________
Y él me abrazó me arrulló, buscó su ayuda y me ayudo a dormir.

Les diré que he vivido de nuevo una de las mejores noches de mi vida, además de inolvidables e irónicamente también perturbante.

Debo decir, que le amo profundamente y que nada tiene esto que ver con lo convencional de ese concepto.

Antes ya lo mencioné acá, y siempre pospuse hablar de él, y ahora mismo no se me antoja ni trabarle un pseudónimo.

Mi mejor amigo es ahora mismo algo que no entiendo, porque de repente caí en la cuenta de que me estaba queriendo apropiar de lo que fluye como el agua… enterarme de que me estaba acomodando a su presencia me hizo padecer un miedo egoísta. Deje de amar sin esperar y entristecí por caer de nuevo en ese sucio vicio de apoyarme sobre una sola roca y tuve miedo de perder.

¿Cómo perder lo que no es tuyo? Bueno, nunca temí perder a Mandy, aunque pasó… y a Las Dos, jamás he pensado que las perdería, que se hartarían de mí… eso no pasa por mi mente porque las amo sin esperar nada a cambio… pero con él se mezclaron los demonios.

Más claro? Recuerdan que estaba bien… hasta la entrada anterior con mis reflexiones de “Porqué pareciera que me encanta estar ASÍ? (triste) pues vino lo triste. Sin embargo y, aunque siempre pensemos que nadie se cura de “nuestros demonios” he notado la diferencia de esta nueva “crisis”… estoy pidiendo ayuda.

Pido ayuda de formas estúpidas, la típica patada de ahogado y luego cuando analizo mis actos me siento ridícula pero siento claramente como estas caídas no son iguales a las anteriores, lo supe desde que le hablé claramente a mi hermano de esta asquerosa TCA y le dije mi miedo a ser la peor de sus influencias a parte de buscar a mi mamá (claro que con ella este tema es peor que hablar con un sordo chino y ciego) cuando mi cabeza me decía que me perdiera de la gente.

Pero esto es definitivo, las palabras salieron de mi y le hablé a mi mejor amigo de esto. ÉL quizá piensa mil cosas, le peí que lo olvidara y accedió, pero sabemos como es esto, es un asco, no se olvida. Temo, porque este amor odio por mis demonios y la vergüenza se mezclan ahora con lo público, pero saben que eso significa el compromiso de hacer las cosas bien. No sé como va a ser mañana y perdón por tratar solo de mi en esta entrada, pero espero que cualquier paso positivo le resulte a alguien de ayuda.

Al final solo me queda decir, que sí exploté, pero Él me amó, y me hizo pensar que quizá “la gran fuerza” también me amé… y aunque sea como una medicina amarga y ahora TODO SEA AMARGO, ya hablé.

Quizá en primer paso sea hablar.